Este es mi pie... y compañia

Hoy voy a recordar la función que vi hace exactamente un año (el 14 de Febrero de 2009) en el pequeño teatro Gran Vía. Estaba en primera fila porque no había más entrada y vi bien cerquita a Eduardo Aldan con su espectáculo “Espinete no existe”

Recuerdo que fue súper divertido, me reí un montón y también hubo un momento en que me puse muy triste. Cantamos, reímos, recordamos cosas de la infancia... fue genial. Pero en una cosa no estoy de acuerdo con Eduardo, yo creo que Espinete si que existe. No decía Gonzalo Torrente Ballester: “Las cosas sólo dejan de existir cuando se deja de creer en ellas“ y como creo en él entonces existe. Porque no puedo pensar que ese erizo rosa que le gustaba tomar el sol y le gustaba mogollón el Barrio Sésamo sea de mentira. Todos hemos querido jugar a los trogloditas, pintar sin parar o ir a la caza de leones con Don Pimpón. Incluso lloré un montón cuando un día se volvía invisible y no aparecía en la media hora del capítulo. Aunque siempre me quedó una duda ¿por qué iba desnudo todo el día y se ponía pijama por la noche?
Porque siempre existirá en la mente de todos los que cada día estábamos esperando delante del televisor para pasar un buen rato y vivir las aventuras de ese Barrio. Y porque aún me pongo a cantar sus canciones como hace 20 años. ¡ESPINETE SI QUE EXISTE!